✏️ “Tanto Yuming, como Ayrton Senna, como John C. Lily dicen que conocer los propios límites significa descubrir una nueva dimensión de la verdad.” Del libro Amrita, por Banana Yoshimoto.
🙉 Muchas veces, por haber ido más allá de nuestros límites, nos encontramos con consecuencias sin entender de dónde vinieron. Tal vez un cansancio profundo luego de haber trabajado o estudiado más de lo normal, o sentirte abrumado después de haber pasado demasiado tiempo con gente, más de lo que tu capacidad de sociabilidad permitía.
👁️ Reconocerlo puede ser un trabajo más difícil de lo que parece porque, por ejemplo, nuestro límite social no es fijo, dependerá mucho del contexto. Pero el cuerpo siempre nos da indicios de cuando estamos llegando a ese punto. Por eso podemos tornarnos más hábiles en esto si empezamos trabajando con el plano físico. Si hacemos alguna técnica que nos exija físicamente, podremos observar cómo se manifiesta esa exigencia: cómo reacciona el cuerpo y cómo responde indicándonos que alcanzamos el máximo. Puede ser un músculo que necesita mucha atención, o el ritmo cardíaco subiendo o la respiración acelerándose. Ir conociendo estas reacciones va a hacer que seamos más hábiles al identificar este tipo de indicaciones, no sólo a nivel físico sino también a nivel emocional o mental.
👀 Conocer nuestros límites nos permite trabajar sobre ellos. Podemos superarlos o simplemente reconocerlos para ser capaces de frenar a tiempo, o incluso abrazar la situación y sus consecuencias y seguir adelante. En nuestras prácticas buscamos reconocer los propios límites y respetarlos, para, a través de un trabajo consciente y placentero, poder superarlos y así potenciar nuestras capacidades.